07 abril, 2009

La asociación de vecinos de Puente Jardín responde a los «interesados» que dan la cara por el barrio

¿Dónde estaban estos ’salvadores’ cuando se quiso privar de suelo dotacional a la urbanización y la asociación tuvo que iniciar un contencioso con el Ayuntamiento? Y ¿durante los dos años de lucha más los anteriores desde el plano individual?



En la fotografía de Ricardo Otazo, varias personas pasean por el parque del Jardín Botánico.


La Asociación de Vecinos Puente Jardín se creó hace poco más de dos años, con el fin de aunar las voces de los vecinos de la urbanización en una lucha conjunta frente a las carencias y el abandono que sufríamos por parte del Ayuntamiento, canalizando las permanentes reclamaciones individuales, desde un colectivo con amplia representación vecinal.

Desde el principio nuestra labor ha sido un constante peregrinaje por las concejalías de Medio Ambiente, Urbanismo, Vialidad y Participación Ciudadana, además de la Confederación Hidrográfica del Duero y los medios de comunicación, para hacer llegar nuestras reivindicaciones a los responsables políticos, lo que ha fructificado en algunos importantes logros:

*Activar la concesión de la Licencia de Primera Ocupación para tres de los seis edificios que carecían de ella, desde hace más de siete años.
*Aumentar la frecuencia de la limpieza de nuestras calles.
*Impulsar el adecentamiento y la conservación del Jardín Botánico.
*Incluir la urbanización en el recorrido de la línea de autobús nº 10.
*Reactivar una mayor presencia policial en la zona.
*Alentar razonadamente la necesidad de la limpieza de las márgenes del Canal de Castilla.
*Adecentar el estanque del Jardín Botánico, cuyo presupuesto aprobado se refleja en la partida destinada por el Gobierno al Ayuntamiento.


Protagonismo

La creación de esta asociación parece fomentar en algunos sectores de la sociedad el miedo a perder su ancestral protagonismo y, en otros, el deseo de acaparar votos a costa de problemas que les son totalmente ajenos y desconocidos. Unos y otros, curiosamente no han dado la cara en los más de ocho años que esta urbanización lleva sufriendo el abandono del Ayuntamiento y, ’por casualidad’, cuando se empieza a ver el fruto de esta asociación salen corriendo a colocar sus fotos y su nombre en la prensa, sin importarles el daño que su acción pueda causar en las negociaciones que la asociación mantiene con el Ayuntamiento, sólo con el objetivo de acaparar un protagonismo en base a la lucha ajena.


Queremos desde estas líneas informar a los desconocedores de nuestros problemas, desde la satisfacción y el agradecimiento al Ayuntamiento, a la empresa encargada del mantenimiento del Jardín Botánico y a la Confederación Hidrográfica del Duero, por su atención y solución de algunos de nuestros ancestrales problemas. Desde el conocimiento por ambas partes, que nuestra lucha continuará hasta ver cumplidos todos los objetivos marcados, que no son otros que la igualdad con otras zonas de la ciudad y acabar con las carencias de una urbanización, que desde su creación ha cumplido con sus obligaciones tributarias, incluso sin Licencia de Primera Ocupación y sin que éstas reviertan en su beneficio.

«Falsos profetas»

Sin embargo existen problemas como el de las aceras, cuya solución pasa por el consenso de los vecinos, en relación a las soluciones planteadas por la Concejalía de Medio Ambiente y que se informarán y votarán en la próxima asamblea de socios.

También nos hemos preguntado ¿Dónde estaban estos ’salvadores’ cuando se quiso privar de suelo dotacional a la urbanización y la asociación tuvo que iniciar un contencioso con el Ayuntamiento? Y ¿durante los dos años de lucha más los anteriores desde el plano individual?

Nos hemos visto obligados a contestar a estos falsos e interesados profetas, pues quienes diariamente hemos sufrido y sufrimos las carencias de la urbanización agradecemos cuantas manos se nos han tendido y tienden (incluidas las suyas por derecho), siempre y cuando no se vea de forma tan clara el interés por colgarse medallas que para nada les corresponden.

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